5 hostales en Río de Janeiro para los presupuestos más ajustados

¿Quieres vivir el auténtico estilo de vida carioca? El barrio de Laranjeiras, muy cerca del Cristo Redentor, acoge al hostal Café Rio, que goza de un ambiente súper tranquilo. En la sala de estar, un sofá invita a disfrutar de una sesión de TV, una partida de póker o disfrutar de unas capirinhas. Además, en la cocina del hostal podrás compartir con los demás huéspedes recetas típicas de tu tierra. En las plantas superiores hay seis habitaciones disponibles: cuatro colectivas y dos privadas con cama doble. Si levantas la mirada, podrás admirar al enorme Cristo que domina la ciudad.

Kariok es un hostal ubicado en el barrio de Gloria, muy cerca de Lapa, uno de los puntos álgidos de la noche carioca. Consta de espacios comunes como una biblioteca, una sala de exposiciones con obras de artistas locales, una zona de barbacoa y cocina. Si te gusta desayunar a lo grande, podrás disfrutar de una extensa variedad de frutas, cereales y otras delicias. Lo mejor es que podrás compartir las fotos de tu viaje a Río de Janeiro gracias al WiFi del alojamiento. Todas las habitaciones, bien ventiladas, incorporan frigorífico, tazas, camas dobles o individuales y baños privados.

Botafogo, en la zona sur de Río, es el barrio que acoge el hostal 021. Sólo cuenta con cinco habitaciones y una capacidad máxima de 35 personas, haciendo que la interacción entre los huéspedes sea constante. Todas las habitaciones están equipadas con camas que cuentan con un foco de luz para leer sin molestar, además de un soporte para el móvil o un libro. Encontrarás otros servicios disponibles como venta de tours, servicio de transfer, alquiler de candados, además de WiFi y alquiler de bicicletas. Para promover el contacto entre los viajeros, dispone de un comedor en el que sirven el desayuno hasta las 11 de la mañana.

YOLO, que significa You Only Live Once (Sólo se vive una vez), es una muy buena excusa para ir hasta la costa norte. Cuenta con un gran jardín, hamacas, bar, piscina y barbacoa. Lo mejor del hostal es que, si quieres, te llevarán a descubrir lugares a los que no todos los turistas van y, si te gusta el deporte, te llevarán a practicar kayak, paddle surf o ciclismo. Para recargar las pilas durante el desayuno, nada mejor que tomar un zumo natural y agua de coco fresca.

Namastê es uno de esos hostales a los que vuelves: la cuidada atención de los anfitriones convierte la experiencia en algo inolvidable. A pesar de que el albergue está algo alejado del centro de la ciudad, el acceso es muy fácil y se encuentra muy cerca de las mayores atracciones de Paraty. El hostal ofrece cocina completa, barbacoa, aparcamiento, hamacas y una sala con TV y sofás.