Ha tenido que pasar una semana para poder decir que ya estoy recuperada. Aquí os vengo a contar mi primera experiencia con el #festivalideal2 en el SOS 4.8.
Hace 9 días salíamos de Barcelona rumbo a Murcia con nuestro súper Nissan cortesía de Sixt. Cuando fuimos a buscarlo la chica nos dijo: ‘El coche no tiene pérdida, es el único que tiene pegatinas’, y no estaba equivocada. Nuestro coche tuneado listo para pasearlo por la AP-7.
Después de hacer las paradas obligatorias por todos los Autogrill que pillamos por el camino, llegamos al AC Hotel Murcia by Marriot y nos recibe un recepcionista con una barba que poco tiene que envidiar al del anuncio de trivago. Gracias, sabemos que lo hicisteis por nosotras ❤. En este primer día sólo nos dio tiempo a darnos un baño en la ducha del futuro, que poco más y tenemos que llamar al barbudo para poder encenderla.
Llegamos al recinto y, gracias a nuestras pulseras de prensa que nos ofreció Ticketea, nos escapamos de la cola kilométrica que había para el cambio de pulseras. Y aquí ya comenzaba nuestra andadura por el SOS 4.8, primera parada: Perro. Eran muchas las ganas de ver a los murcianos, pero sólo pudimos llegar a LA CANCIÓN, pudimos desgañitarnos la voz con Marlotina gritando los nombres de Geroge Finidi, Valeri Karpin y amigos. Total. Después decidimos disfrutar de la sesión de Buffetlibre en la zona VIP con sus 2×1 y sus cosas bonitas y ver a Xoel López y Morrissey desde la grada hasta que llegó el momento más esperado para mí: Metronomy. Algunos los tacharon de aburridos, pero no fue así. The look y Corinne fueron las más coreadas por el público y yo disfrute muchísimo con The bay y Love letters. Un concierto que aún sigue resonando en mi cabeza.
Junto con Years & Years y The Vaccines fueron nuestra banda sonora de la noche. Y no os penséis que todo fue ir de un escenario a otro, la zona VIP se convirtió en nuestra mejor amiga durante los dos días de festival. Y la noche no podía acabar mejor que con Elyella y su confeti, después de esto no nos quedaba más fuerza y fue ‘O nos vamos o no llegamos a mañana’. Cola en la parada de taxi que, cómo ya os conté en la previa, es la mejor parada de taxis de todos los festivales de España, con sus 176483 taxis y con una persona ordenando la cola.
Son las 10 a.m y suena el despertador, eso quiere decir que nos espera EL DESAYUNO. Y lo digo en mayúsculas porque fue lo que nos ayudó a coger energía para poder seguir el ritmo en este último día de festival. Un buffet libre con el que podías coger 4kg en 30min perfectamente. Delicioso.
Después de nuestro festín, nos dirigimos rumbo a la Plaza de la Universidad para disfrutar de los Aperitivos SOS con un solazo digno del mes de julio. Unos 37º muy ricos que casi hacen explotar a los veteranos Fresones Rebeldes pero que no pudieron frenarnos cuando sonaron los primero acordes de Al amanecer. Después de esto llegó la hora de ir a la Plaza de las Flores y comernos unas marineras acompañadas de una Estrella Levante, todo muy bonito. Continuamos con la previa y listas para que sean las 19:00 y dirigirnos hacia el recinto para ver a la súperbanda Mi Capitán, pero mi momento de la última jornada llegó con después con El Último Vecino en el escenario Radio 3, este año he tenido la oportunidad de verlos al menos 5 veces pero nunca me canso. El carisma de Gerard y las letras pegadizas y sublimes hacen que quieras ver a este grupo durante 3 horas seguidas sin parar, en bucle. Recomendados 100%. Hoy he tenido un sueño increíble…
La noche seguía transcurriendo con los concierto de Dorian, Glass Animals y Temples hasta que llega la sorpresa de la noche: Lori Meyers. Había perdido la confianza en ellos después de su último disco y de unos conciertos con un setlist bastante difícil de comprender, pero llega el SOS 4.8 y nos rompe los esquemas. Los granadinos empiezan con Hostal Pimodán y después de esto ya sabes que nada puede ir mal. Funcionará, El gallo ventrílocuo, Viaje de estudios o La mujer esponja fueron algunas de las joyitas que nos dejaron y otras como Mi realidad o Alta fidelidad fueron tarareadas por las (¿más?) 20.000 personas que allí se congregaban. Me acabé reconciliando con ellos, no lo pude evitar. El cansancio pudo conmigo y tuve que disfrutar de The National desde la grada de la zona VIP, pero lo disfruté como una más. Acabamos bailando al ritmo de Gaizka Mendieta & Jon Gasteiz y Digitalism Dj Set y nuestros pies dijeron basta.
One more time suena el despertador a las 10 a.m, nos espera el último desayuno en el AC Hotel Murcial (¡Ohhhhhh!) cogemos fuerzas para las 7 horas que nos esperan de vuelta a casa con nuestro Nissan. Nos despedimos de la ducha futurista, de nuestra nevera, de la cama y de cada rincón de la hermosa habitación. El único punto negativo que podemos ponerle al hotel es que la piscina estaba cerrada y no pude hacer el pase de modelos con el bikini que traía en la maleta.
Dejamos la habitación y nuestro barbudo ya no estaba para despedirnos, a punto estuvimos de dejarle una carta de amor.
¡Hasta la próxima AC Hotel Murcia – Marriot, ha sido todo un placer!
Y hasta aquí mi aventura en el SOS 4.8, ha sido una experiencia increíble poder contarlo todo con #festivalideal2 y que me hayáis podido seguir por twitter (a tiempo real). Nos vemos en mi siguiente parada: El Festival de les Arts y ¡que la música no pare! @fannycalero
